El cambio de estación, el estrés, los cambios hormonales, una exposición constante al secador o la plancha, un cepillado excesivo… son solo algunos de los factores que provocan la caída del cabello.
Ya vimos en un artículo anterior cuáles son los factores que influyen en la caída de cabello, pero hoy es el momento de ver qué podemos hacer para frenar esta pérdida, un problema que puede afectar a todo tipo de personas.
En ocasiones, sin embargo, saber si se está produciendo realmente una mayor pérdida o si ésta debe ser alarmante es complicado. Veamos ahora cómo podemos detectar el problema.
Síntomas de la caída del cabello
Como habrás oído en más de una ocasión, la pérdida de cabello es un proceso natural y normal que se vincula al proceso de regeneración natural de nuestro pelo. De hecho, se calcula que cada día perdemos una media de unos 100 pelos al día.
La sensación de que esta pérdida aumenta, sobre todo cuando descubrimos pequeñas zonas en el cuero cabelludo donde empezamos a ‘clarear’, puede ser una señal de que algo no está dentro de lo normal. Veamos ahora algunos de los síntomas más comunes:
·Cabello en la almohada: una de las formas más habituales de darse cuenta de que se está produciendo más pérdida de cabello de la normal es encontrar cabello en la almohada al despertarnos.
·Pérdida excesiva de pelo después de lavarlo o de manipularlo: si tras cepillarnos el pelo o ducharnos notamos que estamos perdiendo mechones enteros de pelo (y esto se produce de forma continuada), podemos considerarlo un síntoma de alarma en este sentido.
El pelo puede ser el espejo de nuestro estado de salud general. Por eso, cuidar nuestra alimentación y nuestros hábitos es sin duda un factor clave que influye en la calidad de nuestro cabello.
·Molestias en el cuero cabelludo: a la hora de hablar de los síntomas de la pérdida de pelo, si se producen molestias o dolores en el cuero cabelludo, pueden ser debidos a la presencia de dermatitis o de problemas como los hongos, por lo que habría que consultar a un especialista.
·Menor densidad capilar: otro de los síntomas más comunes es el notar menos densidad en el pelo de la habitual. Si a esto le sumamos la detección de zonas que ‘clarean’, podemos estar hablando de un problema grave de pérdida de pelo.
Si estás experimentando la clásica pérdida de pelo de esta época del año o crees que otros factores pueden estar influyendo, toma nota. Aquí van unas sencillas medidas que puedes poner en práctica para acabar con este problema.
1. La alimentación, tu aliada para frenar la pérdida de pelo
Como sabrás, el pelo puede ser una muestra de nuestro estado de salud general. Por ello, cuidar nuestra alimentación y nuestros hábitos es sin duda un factor clave que influye en la calidad de nuestro cabello.
En este sentido, incorporar ciertos alimentos a nuestra dieta puede ayudarnos a tener un cuero cabelludo fuerte y, en consecuencia, un pelo más sano.
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En general, todos los alimentos ricos en vitamina C (como los cítricos o los kiwis, por ejemplo), juegan un papel muy importante en la producción natural de colágeno, extremadamente necesario para la salud de nuestro pelo.
Además, alimentos como la zanahoria (que además de vitamina E contiene potasio y beta carotenos) también puede ayudarnos en este sentido.
¿Un último imprescindible? Todos aquellos alimentos ricos en ácidos grasos y Omega 3, como el salmón o la sardina, que nos ayudan a estimular los folículos pilosos.
2. Productos de calidad para mejorar la salud de tu cabello
Sin duda alguna, cuidar de nuestro cabello con productos de calidad para el cuidado capilar resulta clave para evitar problemas más graves en el futuro. Por ejemplo, aquellos que contienen zinc.
Por ello, dirigirnos a nuestro farmacéutico de confianza será clave para garantizar que estamos utilizando la mejor opción del mercado. En este sentido, un champú de uso diario debe ser formulado con activos naturales para reestructurar la fibra capilar, limpiar y nutrir tu cabello.
Además, debemos tener en cuenta que cierto tipo de productos han sido diseñados con el objetivo de frenar la caída del mismo, por lo que puede ser interesante añadirlos a nuestra rutina capilar.
Ampollas anticaída forte
Con las proteínas de soja logramos fortalecer el cabello y estimular su crecimiento, gracias a su alta concentración de sales minerales, aminoácidos y péptidos. Con el extracto de levadura de cerveza y sus propiedades antiseborreicas logramos ralentizar la caída de cabello.
3. Cuidados diarios para frenar la caída del cabello
Además de una buena alimentación y el uso de productos específicos, existen otros hábitos diarios que podemos incorporar en nuestra rutina con el objetivo de frenar la caída del cabello. Por ejemplo, realizar un masaje diario sobre nuestro cuero cabelludo puede incrementar el flujo sanguíneo en la zona, algo positivo para nuestros folículos pilosos.
Por otro lado, es importante ser conscientes de que el estrés puede ser un factor decisivo en lo que respecta a la pérdida del cabello. Por ello, encontrar momentos para desconectar en nuestro día a día resulta clave –no solo para nuestro bienestar general- sino también para nuestra salud capilar.
Recuerda que si detectas un problema mayor en este sentido, debes acudir siempre a ayuda profesional para descartar problemas más graves y atajar la pérdida de cabello cuanto antes.
Además, los profesionales farmacéuticos pueden recomendarte los productos adecuados para luchar contra el problema. Encuentra aquí tu farmacia más cercana.
