El verano es la mejor época para practicar deporte en familia. Hace buen tiempo y el aumento de horas de luz permite realizar más actividades al aire libre.
Además, los niños están de vacaciones y tienen mucho tiempo libre, por lo que es bueno planear actividades que sean divertidas y que les permita hacer ejercicio. Así podrás pasar más tiempo con tus hijos y fortalecer vuestro vínculo emocional.
Si el calor es intenso, puedes combatir las altas temperaturas practicando deportes en el agua, aunque también tienes otras opciones en la montaña o el campo.
Actividades al aire libre
En esta época, hay opciones muy variadas para hacer ejercicio en la naturaleza y pasar tiempo de calidad junto a tus hijos:
- Pádel: Este deporte se puede practicar en familia, o los más pequeños pueden socializarse mientras juegan con otros niños de su edad. Es un deporte que contribuye a mejorar la agilidad y la resistencia cardiovascular.
- Ciclismo: Puedes salir a hacer excursiones en bici con tus hijos y explorar nuevos paisajes. Pedalear es ideal para el desarrollo psicomotor y la coordinación de los más pequeños.
- Voleibol playa: Este es un gran deporte para fomentar el trabajo y la cooperación en equipo mientras se disfruta de la playa. Tiene numerosos beneficios para la salud y es especialmente bueno para fortalecer los tobillos.
- Escalada: Se puede practicar en la naturaleza o en el rocódromo, y suele ser muy atractivo para los niños. Es un deporte que, además de ser emocionante y mejorar el rendimiento físico, ayuda a desarrollar la capacidad de concentración.
- Fútbol: Ya sea en el campo o en la playa, este sigue siendo uno de los deportes preferidos. Contribuye a la socialización y al desarrollo de la agilidad y la resistencia.
- Yoga: Esta técnica milenaria se puede practicar en contacto con la naturaleza y se está extendiendo rápidamente entre niños y adultos por sus múltiples beneficios. No solo mejora la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio, sino que también entrena las capacidades de relajación y regulación emocional.
Deportes acuáticos
Los deportes acuáticos son ideales para esta estación. Hoy en día hay muchas opciones para que los más pequeños de la casa no se aburran mientras los adultos también pasan un buen rato:
- Paddle surf: Pese a ser una práctica relativamente nueva, se ha extendido rápidamente al ser tranquila pero muy positiva para la condición física. Suele practicarse en aguas calmadas y es como un paseo que ayuda a desarrollar el equilibrio y a trabajar varios grupos musculares, ya que para remar y mantenerse de pie en la tabla hace falta esfuerzo.
- Surf: Para los más atrevidos, el surf puede ser muy emocionante. Es un deporte muy completo que ayuda a entrenar la coordinación y el equilibrio. Los niños pueden empezar a practicarlo desde una edad relativamente temprana, y aprenderán rápidamente a cabalgar las olas mientras se ponen en forma.
- Buceo: Recibir un bautizo de mar es una buena manera de iniciarse al submarinismo. Por norma general, a los niños se les permite empezar a partir de los 10 años. Se puede hacer en el mar o en una piscina, a unos 5-8 metros de profundidad.
- Snorkel: Si no te convence la idea de sumergirte a tantos metros, coge gafas y tubos para toda la familia… ¡y a disfrutar de las vistas bajo el mar!
- Kayaking: Es una gran actividad para hacer excursiones por el mar y explorar calas. Además, remar en kayak no solo fortalece los músculos de los brazos, sino toda la zona central y abdominal.
- Natación: La natación es ideal para mantenerse activo en verano. Ya sea en la playa o en la piscina, es una de las formas más completas de mantenerse en forma. Además, es muy recomendable para la recuperación de lesiones, puesto que tiene muy poco impacto sobre la zona afectada y permite reforzar la musculatura.
En cualquier caso, en verano es habitual pasar tiempo en la playa, la piscina o simplemente al aire libre. Por eso es muy importante que pongas especial atención en el cuidado de la piel de tus hijos ante la exposición solar.
Las quemaduras son más habituales de lo que cabría esperar, por lo que es necesario que durante estas actividades siempre uséis protector solar para protegeros del sol.
Cómo protegerte del sol
Cuando se realizan actividades exteriores en verano, es necesario protegerse del calor y de los rayos solares. Cuidar tu piel y la de tus hijos es crucial para evitar quemaduras y el envejecimiento cutáneo prematuro.
Existen protectores solares especiales para la práctica deportiva, también para niños, disponibles en diferentes formatos y texturas: gel, crema, spray, bruma y aceite, entre otros. Ahora ya no hay excusa para protegerse del sol. Solo tienes que encontrar el tipo de producto y el factor de protección más adecuado a tu tipo de piel. Recuerda que debes aplicar el producto 20 minutos antes de empezar a hacer ejercicio, repitiendo la aplicación durante la exposición tantas veces como sea necesario.
Además, puedes minimizar los efectos solares usando complementos como gorras, viseras y gafas de sol, así como utilizar tejidos y materiales apropiados, como pueden ser licras de baño especiales, mallas o camisetas con protección solar.
También es importante que mantengas una hidratación continua, ya sea con agua o con bebidas isotónicas. Piensa que no es necesario esperar a tener sed para hidratarse, sino que debes beber líquidos de forma regular. La recomendación de los expertos es que, mientras se practica deporte en época estival, hay que ingerir 150 ml de líquido cada hora, llegando a un consumo mínimo de tres litros al día.