La mejor manera de comprender tu forma de pensar y lo que pasa por tu cabeza es escribiendo un diario. Es posible incluso que durante tu adolescencia o primera juventud tuvieras un cuaderno en el que escribieras cómo era tu día a día y las cosas que te ocurrían.
Con el paso de los años la sociedad ha reinterpretado este concepto clásico de diario hasta convertirlo en una técnica perfeccionada de autoconocimiento y superación de objetivos.
Hoy lo llamamos journaling y en este artículo queremos contarte en qué consiste y cuáles son sus beneficios.
¿Qué es el journaling?
Esta técnica de autoconocimiento proviene de la palabra inglesa journal, que en castellano podríamos traducir como “diario”.
No existe una única definición de journaling, pero todas las personas que lo utilizan coinciden: el journaling es un sistema para analizar tu pasado, organizar tu presente y planificar tu futuro.
Imagina que tienes diferentes listas en las que se concentran tus ambiciones y temores: tus deseos, tus objetivos, tus tareas pendientes, los obstáculos que deseas superar, etc. Pues bien, el journaling es un sistema lo suficientemente flexible como para gestionar todas tus listas en un único lugar.
De la misma manera que cuando escribimos un diario, el journaling se realiza en cuadernos en los que se plasman, de forma creativa, todas esas listas: pensamientos, deseos, miedos y esperanzas.
Journaling y creatividad
Esta técnica de autoconocimiento va mucho más allá de las palabras. Es perfectamente personalizable y además de escribir todo lo que quieras también puedes:
- Dibujar con diferentes colores un acontecimiento especial del calendario.
- Pegar elementos externos, como la hoja de un árbol que recogiste en el parque principal de tu ciudad como recuerdo de un día especial.
- Crear una tabla con tus libros favoritos.
- Calendarizar los miedos que deseas superar este año.
- Agregar fotografías de las personas que son importantes para ti.
- Incluir frases de personalidades o famosos que tienen un impacto en tu forma de pensar.
- Esquematizar mapas mentales que te ayuden a pensar mejor.
Cada persona que realiza journaling desarrolla la creatividad a su ritmo, sin mayor pretensión que disfrutar de la soledad mientras se conecta con su propio interior.
Así, no existe una norma estricta de cómo debe realizarse el journaling, sino que cada persona, dependiendo de sus necesidades y deseos, lo desarrollará cómo más le apetezca.
¿Qué diferencia el journaling del diario de bitácora tradicional?
Existen dos grandes diferencias entre ambas técnicas.
La primera está en la manera en que se plasman los pensamientos. En un diario las reflexiones se escriben, mientras que el cuaderno de journaling es una explosión de emociones conectadas a través de palabras, pero también de dibujos, formas, tablas y elementos externos.
La segunda gran diferencia es que el diario revisa el pasado o el presente inmediato, mientras que el journaling observa a la persona que lo practica como un todo, desde sus memorias hasta sus anhelos y su proyección de futuro.
Lecturas recomendadas
Consejos y trucos para realizar la manicura perfecta en casa
A menudo, la vorágine del día a día hace que nuestras manos no luzcan el aspecto que nos gustaría. La compra, el tra…
Lleva ya unos cuantos años confirmándose como uno de los ejercicios físicos más seguidos en todo el mundo, pero situ…
Descanso y salud emocional en momentos de estrés
La situación provocada por el coronavirus ha generado y continúa generando en muchas personas problemas como la apatí…
Journaling y ansiedad
El journaling impulsa espacios de autocreación en los que quien lo practica conecta con sus pensamientos y sus emociones. El trabajo manual y creativo permite impulsar la reflexión y abre la puerta a la aceptación de esas mismas emociones.
El journaling puede tranquilizar y aclarar tu mente. Puede ayudar a liberar los sentimientos reprimidos y el estrés de tu día a día. Puede ayudar a dejar de lado los pensamientos negativos mientras exploras tus experiencias con la ansiedad de una forma segura.
El journaling puede tranquilizar y aclarar tu mente. Puede ayudar a liberar los sentimientos reprimidos y el estrés de tu día a día. Puede ayudar a dejar de lado los pensamientos negativos mientras exploras tus experiencias con la ansiedad de una forma segura.
Existen diferentes maneras de plantearnos quiénes somos cuando realizamos este ejercicio de introspección personal.
A continuación te detallamos algunas preguntas que pueden ayudarte a profundizar en las reflexiones que anotes en tu cuaderno de journaling:
- ¿Qué te hace daño ahora mismo? ¿Cómo puedo encontrar alivio?
- Cuando me miro en el espejo, ¿qué veo?
- ¿Cuáles son las cosas que hay en casa que son más “yo”?
- ¿Qué pasó la última vez que se produjo un cambio en mi estado de ánimo?
- Escribe una lista o dibuja las emociones de todo lo que te preocupa. Reordena los elementos que sepas que son 100% ciertos y no solamente el reflejo de un sentimiento.
Si usas esta técnica o has buscado información en Internet habrás observado que en ocasiones al journaling se le llama bullet journal. Sin embargo, no son lo mismo.
¿Journaling o Bullet Journal?
No, no son lo mismo, aunque su razón de ser tiene un origen común: profundizar en quién eres. Mientras con el bullet journal creas tu propia agenda, el journaling es un diario de vida.
Las tres principales diferencias son:
- El journaling es un diario “interactivo” personal. Bullet journal (BuJo) es todo un método de organización de la información.
- El objetivo del bullet journal es la productividad, mientras que el objetivo del journaling es la autoconciencia.
- El bullet journal suele tener fecha de expiración porque suele relacionarse con objetivos o propósitos profesionales. Sin embargo, el journaling no tiene fin, y puedes actualizarlo con la asiduidad que desees durante el tiempo que quieras.
Guía de journaling paso a paso
Al principio de este artículo hemos comentado que no existe una única manera de realizar journaling y cada persona evoluciona su metodología a medida que se adentra en su utilización.
Sin embargo, no queremos dejar escapar la oportunidad de compartir contigo algunos consejos para que disfrutes esta experiencia al máximo:
- Escoge un cuaderno con como mínimo 100 páginas que te guste y sientas que harás tuyo.
- Divide el cuaderno en tres partes más o menos con el mismo número de hojas.
- A la primera parte llámala “Ayer”, a la segunda parte llámala “Hoy” y a la tercera parte llámala “Mañana”.
- Empieza tu cuaderno desde la sección “Hoy”.
- No es necesario que escribas las fechas de los días que escribes si no quieres, pero si lo haces tendrás una mejor perspectiva del paso del tiempo y te será más fácil ordenar los pensamientos y las emociones.
- Aunque normalmente el journaling se realiza en casa, es posible realizarlo en cualquier sitio. Tal vez quieras que tu cuaderno te acompañe si te vas de vacaciones.
- Recuerda que las normas las pones tú, de manera que siéntete en plena libertad de cambiar el nombre o el orden de las secciones si lo consideras oportuno.
En la era digital el journaling te permite desconectarte del mundo y te ayuda a descubrir quién eres. Impulsa tu lado creativo y te ofrece la posibilidad de reunir toda la información que necesitas para crecer en un solo lugar. Aún así, recuerda que ante situaciones de estrés o ansiedad el consejo farmacéutico es muy útil para orientarte.