La salud bucodental es una de las principales preocupaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que la mayoría de las afecciones que sufre la población son fácilmente prevenibles con una correcta higiene.
La gingivitis y periodontitis, enfermedades relacionadas con la acumulación de placa dental y sarro, afectan aproximadamente al 19% de los adultos (lo que representa más de mil millones de casos en todo el mundo). Sus principales factores de riesgo son la mala higiene bucodental y el consumo de tabaco.
En este artículo queremos explicar por qué aparecen la placa y el sarro, qué peligros representan y cómo podemos prevenirlos.
Características de la placa dental
La placa bacteriana es la acumulación de bacterias y azúcares que quedan entre los dientes tras la comida. Tiene forma de película blanca o transparente y se adhiere de forma natural sobre la superficie de los dientes y la línea de las encías.
Si no se elimina con el cepillado inmediatamente, la placa produce unos ácidos que dañan el esmalte de los dientes y puede llegar a provocar caries o enfermedades como la gingivitis. Además, si se acumula y se solidifica se convierte en sarro.
Características del sarro
El sarro aparece cuando la placa bacteriana se endurece alrededor de los dientes a causa de los minerales de la saliva. Se convierte, entonces, es una masa dura, porosa y de color amarillento que afea la sonrisa y pone en riesgo nuestra salud dental.
A diferencia de la placa bacteriana, el sarro no se elimina con un buen cepillado en casa. Para hacerlo desaparecer es necesario acudir al dentista para que haga una limpieza profunda con el instrumental adecuado.
Para eliminar el sarro es necesario acudir al dentista y haga una limpieza profunda.
La presencia de sarro está ligada a una higiene deficiente, aunque hay ciertas personas que son propensas a que el sarro se acumule entre sus dientes. El principal motivo es el pH de la saliva; ya que si este es muy ácido la placa se adherirá con más facilidad.
¿Cómo afecta el sarro a los dientes y las encías?
Las bacterias que contienen el sarro pueden irritar y dañar las encías e, incluso, con el tiempo, causar alguna de las siguientes enfermedades:
- Gingivitis: se trata de una irritación e inflamación de las encías, lo que daña los tejidos blandos dentro de la cavidad bucal. Puede generar sensibilidad y sangrados. Es la más leve de todos.
- Halitosis: es lo que solemos llamar mal aliento. A la larga este problema puede repercutir en la autoestima.
- Periodontitis: es cuando el sarro se acumula bajo las encías, poniendo en peligro la dentadura y la salud de la boca en general. Puede causar aflojamiento de los dientes y, si no se trata, la pérdida de estos.
- Caries: son aberturas que se forman en los dientes que provocan dolores, sensibilidad y manchas. Si no se tratan pueden causar la rotura de los dientes.
¿Cómo eliminar la placa dental y el sarro?
Como hemos dicho, la placa se elimina con una correcta higiene dental. Y con esto, a su vez, se previene la aparición del sarro que solo puede ser tratado por un dentista.
A continuación, repasamos los consejos básicos de cuidado dental:
- Cepilla tus dientes con frecuencia: recuerda cepillar tus dientes después de las comidas o tres veces al día durante, al menos, dos minutos.
- Usa un cepillo suave y eléctrico: los cepillos eléctricos eliminan mejor la placa que los manuales.
- Limpia todas las superficies de la boca: no olvides la parte de detrás de los dientes o los molares posteriores. Repasa todas las zonas en tu limpieza dental diaria.
- Utiliza una pasta de dientes con flúor para prevenir el sarro: este ingrediente repara el daño en el esmalte.
- Cuida de tu dieta: los alimentos con azúcar liberan ácidos perjudiciales para los dientes.
- No fumes: las personas que fuman tabaco tienen más probabilidades de acumular sarro entre sus dientes.
- Visita al dentista: la mejor forma de prevenir el sarro es hacerle una visita al dentista cada seis meses o un año.
Tratamientos caseros
Si, además de mantener una correcta higiene dental diaria y visitar al dentista periódicamente, queremos darle un extra de cuidados a nuestros dientes existen algunos remedios caseros que podemos aplicar puntualmente.
A continuación, te dejamos tres propuestas:
- Infusión de ajenjo de montaña: esta planta tiene propiedades antisépticas por lo que puede ser muy útil para tratar las bacterias que forman la placa. También, gracias a su fuerte aroma, ayuda a combatir la halitosis. Puedes preparar una infusión y utilizarla para enjugarte varias veces.
- Vinagre de manzana: elimina las bacterias que causan la placa y actúa como blanqueador al equilibrar el pH de la saliva. Para aplicarlo, mezcla agua y vinagre a partes iguales y haz enjuagues por la mañana y antes de dormir.
- Aceite esencial de romero: este aceite natural es desinfectante por lo que elimina todas las bacterias que pueda haber en la boca. Evita la acumulación de placa y sarro y mejora el aliento. Mezcla dos gotas de aceite con agua, enjuágate con la mezcla y después cepíllate los dientes.
Tratamientos de farmacia
En farmacia podemos encontrar todos los elementos que necesitamos para mantener una correcta higiene bucodental en casa: cepillo, pastas de dientes, hilo dental, enjuague e, incluso, irrigador bucal.
Estamos familiarizados con la mayoría de estos productos, tan solo tenemos que acostumbrarnos a utilizarlos con la frecuencia adecuada. Mediante la higiene diaria y el cepillado después de cada comida se elimina una parte muy importante de la placa en formación; por lo que no debemos de descuidar este gesto diario desde que somos pequeños.